(o cómo ayudar a seguir ayudando)
Hay muchos modos de ser gota en una ola, guijarro que se lanza al lago o semilla que se planta en tierra fértil.
A nosotros nos gusta ayudar con nuestra acción itinerante y nuestra presencia, porque siempre hay alguien que necesita algo. El Maletín Verde no es un negocio, es una manera de vivir sirviendo.
Si tu nos quieres ayudar a nosotros, para que nosotros ayudemos a otros, se nos ocurren distinas maneras:
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Danos un libro, un juego, una marioneta... de calidad, tal como te gustaría recibirlo para ti.
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Coopera con algo de dinero (detras de todo servicio gratuito hay alguien que lo hace posible)
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Participa en alguna de las actividades que promovemos o invitanos a alguna actividad que promuevas tu.
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Actúa como punto de recogida de material, o sé nuestro vocero y habla de nosotros a otras personas.
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Envíanos una carta hermosa que nos acopañe en el camino.
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Sé una de las doce personas que sostienen el servicio gratuito a una comunidad.
Aquí puedes ver de manera más detallada cómo hacer real tu cooperación.
La gran ola
Si yo fuera una ola,
no sería una ola,
sino millones de gotitas dándose la mano.
Si yo fuera una ola,
o, más bien, millones de gotitas agarradas de la mano,
cabalgaría el mar, hasta hallar destino.
Si yo fuera una ola,
mientras viajo,
la luz del faro podría verme,
y guiñarme el ojo, en complicidad.
Si yo fuera una ola,
y hallara destino al fin,
llegaría a la roca, a la orilla, al casco de un velero, al cuerpo de una ballena, al ombligo de una niña dando saltos en el mar.
Y los millones de gotas que somos la ola,
brillaríamos llenas de gratitud
a la luz que nos ve,
a las gotas que se unen al viaje,
a la vida que espera topemos con ella.
